Durante los últimos años Justin Bettman, artista y fotógrafo comercial de EEUU ha vivido justo en el corazón de Los Angeles, descubriendo una ciudad llena de voces pero dónde los discursos de personajes ricos y famosos ahogan las voces de gente común que también habita la ciudad.
Bettman, que conoció en ese tiempo a muchas personas sin hogar, decidió hilvanar sus desgastadas vidas en un reportaje fotográfico con el denominador común de un simbólico panecillo, ofrecido a sus modelos a cambio de sus historias.
Para su sorpresa, descubrió que todas esas personas estaban más interesadas en tener un compañero con quién mantener una agradable charla, que en la rosquilla para su sustento.
Si quereis ver el reportaje completo, podéis hacerlo desde el siguiente enlace:
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